El mantenimiento de un aire acondicionado es casi tan importante como su instalación. Ambos casos deben ser realizados por técnicos altamente cualificados y formados. No solo eso, sino que el correcto funcionamiento de tu aire acondicionado viene íntimamente relacionado con la calidad de su instalación y mantenimiento. La mejor manera de alargar la vida útil de un aparato, es sin duda, con un mantenimiento continuo.

Por norma la ley exige cada cierto tiempo, se realice un mantenimiento obligado de un aire acondicionado. Esta norma está publicada en el RD 238/2013 donde en el Reglamento de Instalaciones térmicas en los Edificios (RITE) indica que las periodicidades de las operaciones de mantenimiento de equipos de aire acondicionado han de ser:

• Cada 4 años: Viviendas con potencia térmica inferior a 12kW.
• Cada 2 años: Otros locales con potencia térmica inferior a 12kW
• Cada año: Otros locales con potencia térmica entre 12kW y 70kW
• Cada mes: Locales de todo tipo con potencia térmica superior a 70kW.

El coste que supone una revisión profesional periódica de un aparato de aire acondicionado es más rentable de lo que uno se piensa. Un buen mantenimiento de tu aire acondicionado previene de futuros imprevistos a tu unidad interior y exterior.

Menor consumo de electricidad. Está claro, al mantener tener tu equipo de aire acondicionado en buenas condiciones reduce el consumo eléctrico, lo que reduce la factura de la electricidad.

Mayor vida útil, obviamente, un buen mantenimiento reduce las posibilidades de averías en tu equipo de aire acondicionado, ya que estará funcionando en óptimas condiciones disminuyendo el desgaste del sistema. Y es que hay veces que hablamos de equipos antiguos que no presentan las curvas de consumo eficientes y económicas de las actuales generaciones de climatizadores, las que además son menos dañinas para el medio ambiente.